En el nuevo y electrizante thriller de Daniel Silva, Gabriel Allon se embarca en la bĆŗsqueda de un cuadro robado de Vermeer y descubre una conspiración que podrĆa llevar al mundo al borde del armagedón nuclear.A la maƱana siguiente de la gala anual de la Sociedad para la Conservación de Venecia, Gabriel Allon, restaurador de cuadros y espĆa legendario, entra en su cafeterĆa favorita de la isla de Murano y encuentra allĆ al general Cesare Ferrari, comandante de la Brigada Arte, que espera ansioso su llegada. Los carabinieri han hecho un descubrimiento sorprendente en la villa amalfitana de un magnate naviero sudafricano muerto en extraƱas circunstancias: una cĆ”mara acorazada secreta que contiene un marco y un bastidor vacĆos cuyas dimensiones coinciden con las del cuadro desaparecido mĆ”s valioso del mundo. El general Ferrari pide a Gabriel que busque discretamente la obra maestra antes de que vuelva a perderse su rastro.āĀæEse no es vuestro trabajo?āĀæEncontrar cuadros robados? TĆ©cnicamente, sĆ. Pero a ti se te da mucho mejor que a nosotros.La pintura en cuestión es El concierto de Johannes Vermeer, una de las trece obras robadas del Museo Isabella Stewart Gardner de Boston en 1990. Con la ayuda de una aliada inesperada, una bella hacker y ladrona profesional danesa, Gabriel no tarda en descubrir que el robo del cuadro forma parte de una trama ilegal de miles de millones de dólares en la que estĆ” implicado un individuo cuyo nombre en clave es Ā«el coleccionistaĀ», un ejecutivo de la industria energĆ©tica estrechamente vinculado con las altas esferas del poder en Rusia.El cuadro desaparecido es el eje de un complot que, de tener Ć©xito, podrĆa sumir al mundo en un conflicto de proporciones apocalĆpticas. Para desmantelarlo, Gabriel habrĆ” de llevar a cabo un golpe de extrema audacia mientras millones de vidas penden de un hilo.Ā«EL MEJOR REPRESENTANTE A NIVEL MUNDIAL DE LA NOVELA DE ESPĆASĀ».THE WASHINGTON POSTElegante y repleta de personajes inolvidables y de giros argumentales meticulosamente urdidos, El coleccionista se mueve a velocidad de vĆ©rtigo entre los canales de Venecia y la ventosa costa del norte de Dinamarca, pasando por el cuartel general de la CIA en Langley, Virginia, para conducirnos por Ćŗltimo a Rusia en un desenlace de infarto, tan actual como los titulares de las noticias de maƱana.Ā«Sencillamente el mejorĀ».Kansas City Star