Esta edición especial reĆŗne las mejores aventuras de Bill Bryson en Australia, Gran BretaƱa y AmĆ©rica. Ā”No te lo puedes perder! AcompaƱa a Bill Bryson mientras aprendes curiosidades de cada paĆs, divirtiĆ©ndote con su caracterĆstico toque de humor. Ā Ā EN LAS ANTĆPODASAustralia es mucho mĆ”s que un enorme paĆs. Y mucho mĆ”s que la isla mĆ”s grande del mundo. Es un universo aparte. Seco, Ć”rido, yermo, con un clima extremo y una fauna atĆpica. Un paĆs donde el gusano mĆ”s peludo mata con su venenoso pinchazo, donde las conchas marinas no solo pican, sino que te persiguen, donde un tiburón puede zamparte o unas irresistibles aguas arrastrarte mar adentro. Ignorando estas amenazas, Bill Bryson viajó a Australia y se enamoró del paĆs. ĀæQuiĆ©n podrĆa culparlo? La gente es alegre, ingeniosa y atenta; sus ciudades son seguras, limpias, modernas; la cerveza estĆ” frĆa y el sol brilla con frecuencia. La vida no puede ser mucho mejor que esto.CRĆNICAS DE GRAN BRETAĆAEn 1995, antes de dejar su amado hogar en North YorkshireĀ para regresar con su familia a los Estados UnidosĀ durante unos aƱos, Bill Bryson insistió en hacer un ĆŗltimoĀ viaje por Gran BretaƱa, una especie deĀ recorrido deĀ despedida por la verde y amable isla que habĆa sido su hogarĀ durante mucho tiempo. Su objetivo era hacer un balanceĀ de la cara pĆŗblica y las partes privadas (por asĆ decirlo)Ā de la nación, y analizar quĆ© era exactamente lo queĀ amaba tanto del Reino Unido a pesar de (o gracias a) susĀ muchas excentricidades.VIAJE AL SUEĆO AMERICANOĀ Bill Bryson tiene la rara habilidad de sentirse descolocado donde quiera que vaya, incluso (quizĆ” especialmente) en su tierra natal. Este rasgo de su carĆ”cter se hizo muy evidente cuando, despuĆ©s de casi dos dĆ©cadas en Inglaterra, el escritor de viajes mĆ”s querido del mundo se enfrentó a la Sra. Bryson, al pequeƱo JimmyĀ et al.Ā y todos juntos se trasladaron a vivir al paĆs del que Ć©l se habĆa marchado en su juventud.Por supuesto, habĆa cosas que Bryson extraƱaba de Gran BretaƱa, pero cualquier sensación de pĆ©rdida se contrarrestaba con la alegrĆa de redescubrir algunos de los tesoros olvidados de su infancia, como las glorias de un otoƱo de Nueva Inglaterra o la vista agradablemente cómica de uno mismo en pantalones cortos. Ya sea encarando el extraƱo atractivo de la pizza para desayunar o la terrorĆfica televisión estadounidense, que siempre te deja boquiabierto, Bill Bryson desarrolla su inimitable estilo de ingenio perplejo para soportar el mĆ”s extraƱo de los fenómenos: el estilo de vida estadounidense.